A raíz de un artículo publicado por mi amigo Santi en su blogg (http://santi-unomasunonosondos.blogspot.com), he de señalar que yo no hago caso de las encuestas sobre el sexo y el número de relaciones sexuales que mantenemos con el sexo opuesto. Mienten miserablemente. No me hago responsable de la realidad de cada uno, sí de la mía propia, sobre todo, porque nunca he sido encuestado para dar mi opinión sobre estos temas, ¡qué mala suerte! Por ejemplo, los machitos casados encuestados que responden que el porcentaje es alto.... ¡y un huevo! y lo que responden los solteros, ¡tampoco! No tienen credibilidad los datos de éstos, más aún si la encuestadora es guapa, alta, simpática, ojos claros y rubia rizada, recién salida de la carrera, y hay posibilidad de tema con ella, por si acaso. Me voy a permitir la licencia de dar una opinión sincera. Por las experiencias que he podido constatar entre el público masculino en que me muevo y después de muchos años de terapia, puestas en común y convenciones masculinas internacionales a las que he asistido como invitado sobre sexo, he podido llegar a conclusiones muy jugosas; sí tengo claro que de solteros, casi todos, casi todos, y como apreciáis, digo casi todos, aprovechábamos (primera persona del plural) "el aquí y ahora", esto es, cuando podíamos y nos dejaban, nada más. No existía la petición propia, el voto masculino era poco menos que ninguneado de no ser que fueras George Clooney, Brad Pitt, el Pato Donald o un extraterreste de dos miembros o bien tu nómina tuviera más ceros que pelos tengo yo en la cabeza, que son muchos todavía. Una vez casados, la cosa cambia, y no hay que ser mentirosillos.... El primer año, la media de encuentros sexuales no es alta, pero casi todas las semanas, más o menos, ¡mambo! Es decir, entre 50 y 60 anuales no bajábamos ninguno, ¿verdad? y dependiendo de la estación del año, que si el frío que si el calor, también puede variar el porcentaje, subamos la cifra a los 70. A partir del primer año de casados, la cosa cambia de nuevo, lo podemos denominar "el quincenal" y cuando toca con semáforo rojo, se pierde turno, es decir, ese ya no lo recuperamos por lo que, si no me fallan las matemáticas, tocamos no más allá de 20 o 25 anuales, o lo que es lo mismo, la mitad del año anterior o menos de la mitad. En el segundo año de casados, si todavía no hay otras circunstacias que lo impidan la cifra es similar, esto es, si añadimos que los dolores de cabeza son cada vez más frecuentes y que hoy vas sin afeitar, la cifra no supera los 15 anuales, es decir, "el mensual" y "el de regalo" cuando toca.... Malos augurios me esperan a partir de ahora. Así pues, acepto comentarios de todos aquellos que os hayáis casado antes del 2006 y comentarios del sexo opuesto para ver cómo, entre todos, podemos tomar medidas y equilibrar estas cifras, que son peores que las que ha presentado Zapatero hoy en el Congreso.
miércoles, 10 de septiembre de 2008
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2 comentarios:
ufffffffffffff, estadísticas..........
ESTADISTICA: ciencia que dice que si yo me como dos pollos, y tú ninguno, resulta que nos hemos comido uno cada uno. Buen provecho!
No hablaré de este asunto si no está delante mi abogado...
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